Transcripción

Ahora que hemos analizado los distintos tipos de ondas, podemos estudiar la naturaleza del sonido. Este conocimiento es vital para la correcta aplicación de técnicas de grabación, y tratamiento acústico.

¿Qué es el sonido? El sonido es una onda mecánica que consiste en los cambios en la posición de las partículas del medio que atraviesa. Como mencionamos antes, esto es similar a la onda producida al arrojar una piedra en un estanque. Generalmente, el sonido se desplaza a través del aire, por lo que la onda mecánica que conforma el sonido, suele consistir en cambios de posición en las moléculas de aire (Figura 2.4). Al moverse estas partículas, se producen zonas de alta y baja presión. Cuando las partículas se juntan, hay alta presión. Cuando las partículas se separan, hay baja presión. Es por esto que muchos consideran al sonido, una onda que consiste en cambios de presión.

Figura. Cambio en la posición de las moléculas de aire.

Cuando la onda de sonido se encuentra con obstáculos en el medio a través del cual se propaga, las partículas de aire que oscilan, chocan contra el obstáculo, ejerciendo cierta fuerza sobre ese objeto. La cantidad de fuerza o presión que la onda ejerce sobre el obstáculo, se conoce como la amplitud de la onda, la cual se puede representar en un gráfico (Figura 2.5). En este, el eje X expresa el tiempo transcurrido, mientras que en el eje Y se encuentra la presión ejercida por la onda. Por lo tanto, el gráfico muestra la presión que la onda de sonido ejerce sobre el objeto, a lo largo del tiempo.

Figura. Amplitud de una onda.

Este fenómeno es aprovechado para poder captar el sonido. Los micrófonos poseen una delgada membrana de un plástico especial, llamada diafragma, la cual se mueve de acuerdo a la fuerza ejercida sobre ella por una onda de sonido (Figura 2.6). Este movimiento es el que produce la señal del micrófono. El tímpano en nuestros oídos también se mueve de acuerdo a la fuerza ejercida sobre él por la onda de sonido, como estudiaremos durante la siguiente lección.

Figura. Diafragma de un micrófono.

La amplitud de una onda de sonido está directamente relacionada con el volumen al que la onda es percibida. Cuanto mayor sea la amplitud, mayor será el volumen percibido. No obstante, la amplitud no es el único factor que determina el volumen al que percibimos la onda. Estudiaremos estos factores a profundidad, en la siguiente lección.

Cabe mencionar que la amplitud se mide en la unidad decibel (dB). Los decibeles son una unidad que expresa cambios relativos en una magnitud. Existen varios tipos de decibeles, pero en la mayoría de los decibeles utilizados en audio, una duplicación de amplitud corresponde a un aumento de 6 dB. Por ejemplo, el doble de 70 dB no es 140 dB, sino 76 dB.