Metáforas y clichés

Metáforas y clichés

Published On Apr-24-2017

Transcripción

Son muchos los recursos literarios que el letrista tiene a su alcance para generar letras interesantes y profundas. En esta ocasión, estudiaremos el concepto de metáfora, enfocándonos en los diferentes tipos que existen y en cómo usar esta figura para mejorar la calidad de una letra. 

La metáfora es una descripción indirecta de una cosa. Dicho de otra forma, consiste en expresar una idea, usando palabras ajenas a dicha idea. Por ejemplo, la frase “el ocaso de la vida”, es una metáfora. ¿Por qué? Porque la palabra “ocaso” se refiere al atardecer, la parte final del día, antes de que caiga la noche. Por esta razón, la frase “el ocaso de la vida” tiene como función expresar la idea del fin o el oscurecimiento de la vida. Otro ejemplo de metáfora es la frase “la perla de tus ojos”. En este caso, se está comparando los ojos de alguien con la belleza de una perla. 

Por lo que hemos visto, es evidente que la metáfora es una colisión de ideas. Es decir, es la combinación de dos palabras o ideas distintas, las cuales, al juntarlas, adquieren un nuevo significado. Las metáforas son sumamente útiles para expresar ideas comunes de forma original y creativa. 

A continuación, estudiaremos tres tipos de metáforas ampliamente usadas en el songwriting:

Metáfora de identidad: es aquella metáfora que establece o afirma la identidad de dos sustantivos. O sea, usa dos sustantivos no relacionados, con la finalidad de transmitir una idea nueva. La frase “este auto es una tortuga” es un ejemplo de metáfora de identidad, ya que se está comparando el auto con una tortuga, estableciendo así que es un auto muy lento. 

Metáfora calificativa: este tipo de metáfora tiene la función de calificar un sustantivo mediante un adjetivo. La frase “corriendo, eres un rayo brillante” ejemplifica una metáfora calificativa, ya que la palabra “rayo” se usa para describir o calificar la velocidad a la que alguien corre. El adjetivo “brillante”, se usa con la finalidad de transmitir una imagen más específica. Tanto la metáfora verbal como al de identidad sirven para calificar un sustantivo. La diferencia radica en que, en la primera, solo usamos un sustantivo, y en la segunda, se deben usar dos. 

Metáfora verbal: se forma cuando se genera colisión entre un sujeto y un verbo y este último no tiene una función calificativa, es decir, no se usa para calificar al sujeto. La frase “la niebla comenzó a aletear en el bosque” es un ejemplo de metáfora verbal. En esta ocasión, se produce una colisión entre “niebla” como sustantivo y “aletear” como verbo. Sin embargo, el verbo no está calificando o describiendo una característica de la niebla, es decir, no está diciendo como es. Por el contrario, el propósito del verbo es formar una imagen mental acerca de cómo la niebla se esparce en el bosque. 

De hecho, las metáforas son ideales para cambiar clichés. El cliché, en el contexto del songwriting, es una línea o frase, la cual ha sido usada tantas veces, que ha perdido su impacto o fuerza emocional. El uso excesivo de clichés en una canción hace que esta se vuelva predecible y, por lo tanto, aburrida. Un ejemplo de frase cliché es la frase “el amor es ciego”, ya que ha sido usada en muchas canciones, con más o menos las mismas palabras. Esta línea puede mejorarse al utilizar una metáfora que exprese la misma idea. La línea “la espesa niebla del amor” podría funcionar, ya que la idea de la espesa niebla sugiere una dificultad o imposibilidad de ver, lo cual transmite la idea originalmente escrita.

Entonces, mediante el uso de metáforas, el compositor puede crear líneas cargadas de expresividad. Además, puede convertir una letra cliché en una línea original y profunda.