Transcripción

Ahora, hablemos de un tema primordial en la implementación de nuestro proyecto musical para este técnico medio: el equipo de trabajo. Ningún profesional en la industria musical es capaz de ejercer su oficio exitosamente, sin ayuda de otras personas. Para el productor es fundamental integrar un equipo de trabajo eficiente y efectivo. 

Formando el equipo

Para encontrar a las personas adecuadas, el productor musical debe hacer uso de todos los recursos a su disposición: preguntando a conocidos y colegas, revisando los créditos de otros proyectos para contactar a los involucrados, o incluso realizando audiciones o entrevistas. Por lo general, con el paso del tiempo, la experiencia obtenida trabajando en diferentes proyectos y estudios de grabación, le ayuda al productor a crear una cartera de contactos, de manera que cuando recibe un proyecto y lo analiza, utiliza sus experiencias pasadas para definir a quienes contratará. 

Comunicándose con el equipo

El productor debe ser capaz de comunicarse claramente con su equipo de trabajo. En algunos casos, esto incluye la adquisición de conceptos técnicos y musicales, para saber explicarse mejor y comprender lo que las personas del equipo le desean comunicar. En otros casos, la comunicación representa asumir el rol de liderazgo para entregar información asertivamente, sin afectar el ambiente de trabajo. Esto representa la necesidad de tener una mente abierta, y tener disposición para tomar una perspectiva empática con los integrantes del equipo de trabajo. 

Supervisando al equipo

El productor debe ser capaz de supervisar a su equipo. Esto implica tener experiencia en las diversas áreas administrativas, de negocio, técnicas y musicales que forman parte del proceso de producción. De otro modo, se hace necesario contratar personas que se encarguen de supervisar y facilitar el flujo comunicativo. 

Por ejemplo, si un productor tuvo una formación técnica como ingeniero de sonido y carece de conocimientos musicales, debe contar al menos con una persona de confianza que le ayude a supervisar los procesos musicales, y entenderse con los profesionales musicales del proyecto. De otro modo, su supervisión y retroalimentación con los especialistas musicales se verán obstaculizadas.